jueves, 14 de agosto de 2008

Sucede

Sentado en la silla de mi habitación, con la cabeza a punto de explotar por la inmensidad de ideas que golpean mi mente, una tras otra, sin cesar…


Pienso en aquellas cosas, aquellos momentos, acciones….todas esas cosas que pude haber evitado, de alguna forma u otra, que pude haber cortado antes de que fuera peor, antes de que consiguiera abrirse una herida de tal forma que cerrarla costara mucho más tiempo…


Pienso en lo confiado que he sido, por llamarlo de una forma bonita, y no repetirme una y otra vez estúpido por los fallos que he cometido…


Me sorprende como el ser humano es capaz de actuar de una manera tan fría, tan seca, tan hipócrita, como una persona es capaz de enseñarte un rostro para que bajemos la guardia, y una vez nos tenga a su antojo, cambiar radicalmente…


Hacer daño a los demás, ya sea psicológica o físicamente, sobre todo a los seres queridos es algo que no me entra en la cabeza, como puedes llegar a tratar mal a alguien que has querido, o incluso sigues queriendo, sin un motivo de peso y sobre todo sin un ápice de remordimiento…


Porque nos cuesta menos hacer las cosas mal que las cosas bien, porque nos cuesta más decir te quiero a decir adiós, porque nos cuesta tanto dar un abrazo, o sentarnos a escuchar a una persona…


Porque la gente no ve mas allá de sus propias narices, de sus problemas, y se preocupa un poco mas por la gente que le rodea, y que le ayuda, acaso no deberíamos agradecer el doble la ayuda que nos ha dado una persona sin que se lo hayamos pedido, pero necesitándola…


Si no estás seguro de algo no prolongues la agonía, no busques excusas baratas o una huida fácil, de la realidad en la que vives, no sabes el dolor que puedes causar alargando una situación tensa, desagradable o fría…


Y sobre todo, más que ninguna otra cosa, se un poco mas reciproco, ponte en la piel de los demás cuando vayas a tomar una decisión, o una respuesta, no hables por hablar, piensa bien lo que vas a decir, y las repercusiones posibles que van a acontecer…


Aunque personalmente siempre he dicho que no me arrepiento en absoluto de las cosas que me han pasado, de ninguna de ellas por muy malas que hayan sido…


Traición, ira, tristeza, llanto, soledad, miedo…he llegado a sentir con una intensidad enorme cada uno de estos sentimientos y muchos más, pero también he podido sentir el amor, la ternura, la belleza, el calor…


Las cosas suceden por una razón, un motivo que nos impulsa a que ocurra, en ocasiones no nos damos cuenta, y buscamos un porque, donde no lo hay, pero os puedo asegurar que con el tiempo todo tiene una conclusión, y una respuesta a nuestras preguntas…


Si no me hubieran pasado muchas de las cosas que he vivido, no habrían sucedido muchas otras, si no hubiera tenido una mala experiencia en una relación, no habría escrito sobre ella, y no habría conocido a otras personas que se interesaron por mi…


Si no hubiera terminado una relación, no podría haber conocido a otras personas, más maravillosas, y que me aportaron su granito de experiencia…


Porque con cada acontecimiento de nuestra vida, bueno o malo, nos reporta una experiencia que es de una importancia vital, ya que podemos utilizarla a nuestro favor, de repetirse el caso, e ir preparados…


No busques una razon para lo que pasa, sigue adelante, no te estanques y tarde o temprano econtraras la respuesta.

No hay comentarios: